Plasmamos en un mural nuestras emociones

 Las emociones colorean las experiencias y pueden determinar aquello que recordamos. Seguramente recordemos aquellos/as docentes que de alguna u otra forma dejaron una huella en nosotros/as. Esto nos habla del fuerte impacto que tienen las emociones en el aprendizaje. “Aprender es algo dinámico, social y dependiente del contexto porque las emociones son y forman una pieza crítica del cómo, qué, cuándo y por qué las personas piensan, recuerdan y aprenden” (Immordino Yang, 2017, p. 19). Las capacidades cognitivas tan relevantes en la escuela como el aprendizaje, la memoria, la atención, la toma de decisiones, la motivación y el funcionamiento social, son profundamente afectadas y están íntimamente entrelazadas con la emoción.

Por este motivo a partir de agosto nuestra escuela comenzó a desarrollar diferentes talleres sobre la gestión de emociones. Primero la Licenciada Patricia Labrador trabajó las emociones de los alumnos en el aula. El objetivo de esta actividad fue que los chicos pusieran en palabras lo que sienten (alegría, tristeza, asco, ira, miedo) y así gestionar lo que sienten y que hacer con esa emoción.

Además la Prof. Patricia Guevara desde la ESI desarrolló talleres sobre el autoestima en los adolescentes. Y para terminar, la Prof. Flavia Gonzalez de Prácticas Artísticas junto a los alumnos de 3° 2° desarrollaron Murales en el patio de la Escuela.






Cómo dice la frase del mural: " UN CORAZÓN EN PAZ, FLORECE INCLUSO SOLO", nos recuerda que gestionando nuestras emociones y estando en paz con nosotros mismo nos ayudará a tener una mejor convivencia con los demás.